Mañana, miércoles 2 de julio, a las ocho de la tarde en el Hotel Velázquez de Madrid (calle Velázquez, 62), tendré el gusto de presentar el libro de Joaquín Santaella Cartas de Sotogrande, Marbella: Edinexus, 2014 (http://goo.gl/yoEtEt).
Con un buen bagaje periodístico, pues fue corresponsal de la Agencia EFE en Brasil y subdirector del suplemento dominical de ABC, Joaquín Fernández de Santaella Martín-Artajo es un destacado escritor del que ya nos hemos ocupado en este rincón a propósito de su notable Vino torcido (http://goo.gl/d389ef).
Desde hace mucho tiempo reside en Sotogrande, esa curiosa joya del Campo de Gibraltar, y el libro que ahora publica expone en forma de reportaje personal e intimista cómo es Sotogrande durante todo el año desde el punto de vista de las personas que viven allí en las cuatro estaciones. De hecho, el libro está dividido en cuatro partes, o cuatro cartas, una por estación. Y el objetivo del autor es que hable a través suyo el propio Sotogrande, lo que posiblemente explique que la preposición del título no sea “desde”.
El buen oficio periodístico de Santaella se nota en el relato, por el que desfilan personajes de los que el escritor subraya o descubre siempre facetas de interés, emocionantes o graciosas, enmarcadas en esa naturaleza muy viva en la que discurre una vida social no reflejada en los escasos momentos en los que Sotogrande es objeto de singular atención por parte de la prensa rosa.
Todos los que tenemos alguna relación, siquiera pasajera o estival, con ese maravilloso lugar (que tanto debe a la iniciativa privada, perdón, se me ha escapado) que cumple medio siglo apreciaremos el talento y la delicadeza de Joaquín Santaella al contarnos cómo viven las cuatro estaciones los afortunados, que no necesariamente ricos, que han decidido instalarse junto a Gibraltar y al viento en ese precioso “asentamiento que no es del todo campo, pueblo, ni ciudad”.
(Artículo publicado en La Razón.)