La caída del Muro de Berlín, ese gran triunfo de la libertad, fue también un golpe a la ideología antiliberal, que ha practicado desde entonces singulares contorsiones.
El premio Nobel de Economía, Joseph E. Stiglitz, afirmó seriamente en El País que el capitalismo, ahora llamado “neoliberalismo”, ha sido un desastre, porque “la total desregulación de mercados” fue “causa fundamental” de la crisis, “el crecimiento se desaceleró, y sus frutos fueron a parar en su gran mayoría a unos pocos”; aseguró seriamente que el mercado se impuso a los Estados, porque “Wall Street tenía más poder político que la ciudadanía”, y “el neoliberalismo lleva cuatro décadas debilitando la democracia”.