Según este documental, basado en un texto de Naomi Klein, el comunismo fue apenas “un cuento de hadas”, y el Muro de Berlín no simbolizó un sistema totalitario y criminal sino solo “la división de Europa”; lo malo del comunismo fue…lo que vino después por culpa de los economistas liberales. Quien cree eso, quien cree que la maldad es sólo debida a políticos como Margaret Thatcher y al camelo del “fundamentalismo de mercado”, que jamás ha existido, ya puede creer cualquier cosa. Aquí van unas muestras: las burbujas y las crisis son creadas por las empresas privadas y los mercados, no por autoridades ni organismos públicos como los bancos centrales; las mejores políticas económicas son aquellas en las que los burócratas fijan precios y salarios; lo peor, claro está, son los Estados Unidos, único país al que se responsabiliza del terrorismo, aunque se rescata a sus presidentes “no militaristas” como (agárrese) F.D. Roosevelt. Lógicamente, Milton Friedman organizó el golpe de Videla, porque en la Argentina no pasaba nada antes. Y el golpe de Pinochet fue culpa exclusiva de la perversidad de EE UU, porque en Chile tampoco pasaba nada. La URSS no quiso jugar en el Estadio Nacional de Santiago porque los comunistas luchan por los derechos humanos, y en ese estadio había habido presos políticos; nunca hubo presos políticos en la URSS, claro está. Para que quede claro, sólo se habla de campos de concentración ¡en Chile!