El creador de la serie Respira, Carlos Montero, declaró a El Mundo que el drama hospitalario que ha dirigido pretende “aportar un granito de arena al debate sobre la sanidad pública, porque soy uno de sus fervientes defensores…es una de las joyas de la corona que tenemos en España y sentir que la están desmantelando me preocupaba a mí y a muchísima gente”. En realidad, lo que aporta es una propaganda ilustrativa por su descaro estatista. Aunque Montero presume de realizar una exploración equilibrada de la cuestión, el espectador no contempla más que una sucesión de demagógicas consignas antiliberales.