Habitualmente tendemos a pensar en manada, y son pocos los que se atreven a romper con la ortodoxia mayoritaria, en cualquier campo del saber. Sin embargo, no solo es evidente que la mayoría no significa intelectualmente nada a la hora de ratificar la veracidad o falsedad de cualquier teoría, sino que de hecho a menudo sucede que son las minorías las que tienen razón.