Una variante del prejuicio antiliberal que comentamos en el artículo anterior es la teoría de los fallos del mercado, que prueba que el sesgo liberal de la teoría económica es una invención.
Adam Smith ya sabía que el dinero tiene externalidades
El origen de esa teoría suele remontarse al artículo de Bator de 1958, pero en realidad los fallos del mercado acompañan a la economía desde cualquier partida de nacimiento que le asignemos. Por ejemplo, mientras que es habitual que el economista convencional se niegue a considerar cualquier alternativa al monopolio público de la moneda con el argumento de que tiene externalidades, es muy infrecuente que se recuerde que quien planteó la noción de las externalidades y riesgos sistémicos del dinero y las finanzas (no con esas palabras, desde luego) fue nada menos que Adam Smith en La riqueza de las naciones de 1776 (los curiosos pueden verlo en las págs. 416-417 en la edición de Alianza).