Clifford Hugh Douglas, el mayor Douglas, una figura popular hace un siglo, creía que había dos clases de pagos: los salarios y los beneficios, por un lado, y los pagos a proveedores y bancos, por otro. Como los precios de la economía deben ser suficientes para remunerar ambos grupos de pagos, porque en caso contrario quedarían mercancías sin vender, su propuesta era recortar los precios a los consumidores por debajo del coste, y a continuación compensar a los productores entregándoles títulos de la deuda pública, lo que aumentaría la demanda pero no la inflación.