El odio de la izquierda a Franco y a la Iglesia Católica son fáciles de entender. Lo peculiar son sus piruetas a la hora de practicar una de sus dos estrategias fundamentales: la mentira.
El odio de la izquierda a Franco y a la Iglesia Católica son fáciles de entender. Lo peculiar son sus piruetas a la hora de practicar una de sus dos estrategias fundamentales: la mentira.