Warren Sánchez, el hombre que tiene todas las respuestas, ha probado también que es capaz de saltarse todas las barreras que puedan dificultar su ejercicio del poder. Afirmó a propósito de los indultos: “hay momentos en los que lo útil es el castigo; ahora lo útil es el perdón”. Normal. Si nos asombramos ante la oportunista falta de principios de Warren es que nos hemos pasado los últimos años mirando púdicamente hacia otro lado.