La fallida investidura de Pedro Sánchez fue algo inédito: nunca en la historia de nuestra democracia un candidato propuesto por el Rey no consiguió los votos necesarios en el Congreso de los Diputados. En el mundo económico se extendió la inquietud ante un escenario desconocido que nos puede llevar a la repetición de las elecciones que, de no cambiar los resultados de manera apreciable, nos empujaría otra vez a un precario punto de partida.
Suele pensarse que la incertidumbre sobre la investidura enfría el mundo de los negocios. Hace poco el Wall Street Journal publicó un reportaje sobre España que sugería que la recuperación de nuestra economía está en peligro. Ponía ejemplos concretos de empresarios que habían retrasado determinadas inversiones temiendo una subida de la presión fiscal o un incremento en los costes de diverso tipo –laborales, regulatorios, etc.– que las autoridades imponen sobre el sector privado.
Pero una cosa es demorar el comienzo de una inversión y otra cosa es suspenderla definitivamente: para que esto tenga lugar ha de producirse una catástrofe. No está nada claro que esto vaya o pueda suceder, y en cambio sí está claro que la recuperación de la economía española es firme y se coloca a la cabeza la eurozona.
Hay otras informaciones que apuntan hacia una mayor inquietud, que son las encuestas de opinión o de “clima” empresarial o económico. Estas encuestas, efectivamente, han empeorado en las últimas semanas, pero conviene recordar que son sólo encuestas de opinión, y que están muy influidas por los vaivenes de la Bolsa y por las perturbaciones políticas de cada día. En cambio, los datos de la economía real española siguen siendo buenos, desde la actividad económica, sobre la cual el ministro de Economía, Luis de Guindos, dijo que se trataba de una “ligerísima desaceleración”, hasta las exportaciones, el dinamismo industrial y las operaciones empresariales en diversos campos, incluido el inmobiliario.
No digo que no haya nubarrones en el horizonte, ni tampoco que la política no tenga influencia alguna en la economía. Digo que hasta el momento lo que vemos no es nada parecido a una tormenta.
(Artículo publicado en El Periódico de Sotogrande.)
Mi admirado profesor, comparto, como casi siempre, su punto de vista monocroeconomico, pero no es menos cierto que una repetición de elecciones con los mismo candidatos podrían terminar en catástrofe nacional, y es por ello por lo que le he escrito al Sr.Rajoy el siguiente alegato, que me gustaría, que usted comentara. Gracias
«Mi querido Mariano, lamento que estés liderando ahora la España del Esperpento, probablemente no por tu culpa, pero es un hecho que no admite dudas, un PSOE perdido entre los nacionalismos y los populistas, apoyado por un supuesto partido de Centro-Derecha (Ciudadanos) que no se sabe muy bien a que juega, y todo ello aderezado por el separatismo catalán, al que también se unirán los vascos, en una España que apenas quiere salir de la crisis, con el peor periodismo de los últimos 40 años (salvo honrosas excepciones) , te han llevado, como digo, a liderar este esperpento. Y tu que puedes hacer? pues la verdad que no te quedan muchas salidas, a ti como a Pedro Sanchez, solo te salvaría formar gobierno, pero con quien?, pues a la vista de lo acontecido «nadie te quiere ya» como dice la canción, Así que lo único decente que puedes hacer es dar un paso atrás, o sea, dejar paso a un nuevo equipo (no a tu equipo que te adula para mantenerse en el poder) que no esté afectado por los casos de corrupción ni por los «sobres». Pues de no hacerlo en las próximas elecciones se podría repetir el mismo o similar resultado y entonces si que te echará tu propio partido, así que ahórrate ese mal trago, y deja la política con algo de elegancia, acorde con tu trayectoria de hombre de Estado y no como un politicastro mas de este esperpentico país. Con mi reconocimiento por la difícil labor realizada en tus 2 primeros años de gobierno, y con mi reproche por no haber cumplido partes importantes de tu programa y que hubieran mejorado el paro (entre otras: derogar la ultima reforma de la Ley Anti-tabaco -300.000 empleos-; reforma labora «completa» 1.000.000 de puestos de trabajo; reforma de las administraciones municipales (descargar 1/3 de los cargos de concejales, y agrupación de pequeños municipios, y suspender la autonomía catalana temporalmente, para que vean que la Constitución hay que cumplirla). Con mis mejores deseos para tu jubilación como político, pues ya has dado bastante al país, que se sacrifique otro mas joven y con menos gravámenes (esto lo entenderás bien, pues para eso eres Registrador).
Desde luego no le faltarán a usted compañeros en esta idea. Lo que no tengo claro es que Rajoy acepte dar un paso atrás, pero puede ser, nunca se sabe.